La bodega
Cuando llegamos a la finca, ahora hace diez años, encontramos una bodega fantástica y antiquísima que había estado dormida desde principios del siglo XX.
Nosotros la hemos despertado, la hemos restaurado cuidadosa y respetuosamente y ahora vuelve a sentirse el aroma del vino.
La estructura y distribución originales no han sido modificadas, al contrario. Y no por razones sentimentales o estéticas sino porqué encaja perfectamente con nuestra concepción de vino .
Para nosotros es un privilegio trabajar en este marco incomparable.